Se negó a desconectar a su esposo que estaba en COMA lo que paso... Prepárate para llorar con está historia.

Se negó a desconectar a su esposo que estaba en COMA lo que paso... Prepárate para llorar con está historia.

lunes, 13 de julio de 2015

Dedicaba horas a hablarle, para ver si conseguía algún tipo de respuesta. Y el milagro llegó finalmente tres meses después: Matt abrió los ojos.

Sólo siete meses pasaron desde que Danielle Josey Davis se casó para que la tragedia se cerniera sobre su vida. Un accidente de moto dejó a su esposo Matt al borde de la muerte, en estado de coma. Era el año 2010 y los médicos sentenciaron: "hay un 90% de posibilidades de que su marido jamás despierte, es mejor desconectarlo".

Ella se negó a hacerlo. Algo en su interior le dijo que no era el momento. Y su corazonada era correcta, porque contra todo pronóstico su marido despertó del coma tres meses después del accidente. Lo hizo en la casa de Danielle. El padre de Matt había fallecido dos años antes, y su madre estaba gravemente enferma, así que Danielle era la única persona que podía cuidar de él. En Estados Unidos, mantener a una persona en coma en un hospital es un gasto muchas veces inasible por el común de los mortales. Así que la joven decidió llevárselo al hogar que la pareja compartía.


La abnegación de Danielle es digna de elogio. Conoció a Matt tan solo dos meses antes de que se casaran, y 7 meses después se encontraba en una situación de total entrega hacia él. Tenía que vigilar las máquinas que le mantenían con vida y cambiar el suero con el que se alimentaba. También aprendió a realizar ejercicios de fisioterapia que tenía que practicar con el cuerpo de su marido para que sus músculos no quedaran atrofiados.

Y además, dedicaba horas a hablarle, para ver si conseguía algún tipo de respuesta. Y el milagro llegó finalmente tres meses después: Matt abrió los ojos. Como cuenta Danielle a ABC News, el despertar de Matt fue un proceso lento. Primero empezó en su mirada. Luego poco a poco con el habla, pero diciendo incoherencias. Y finalmente el gran paso: Matt se reclinó un día y cogió con la mano el juguete de una moto. Ese era el paso definitivo que los médicos habían marcado para asegurar que había superado por completo el coma.